domingo, 31 de julio de 2011

Google Docs compartidos

Google docs fue parte de los cursos de capacitación para docentes que íbamos a trabajar con el 1:1 en mi escuela. Debido a que para abrir una cuenta en google el requisito es tener edad para firmar un contrato legal, no podía pedirle a mis alumnos de 12 años que crearan un usuario. Por lo tanto, al comenzar el año, creaba yo los docs y los publicaba otorgando permiso para editar a cualquiera que tuviera el link. Esta práctica tenía algunas desventajas:

  • Era frecuente que alguien borrara lo que otros habían editado, las ediciones eran anónimas.
  • Todas las producciones eran públicas, lo cual no era necesario.
  • Los alumnos se estaban perdiendo la posibilidad de aprendizajes que podían servir para su formación como ciudadanos digitales.

No suelo insistir con lo que no funciona. Abrí una cuenta en google para que la compartiéramos entre todos. Esto provocó un nuevo escenario que resolvió algunos problemas y multiplicó las posibilidades en la adquisición de nuevas competencias.

  • No sé por qué razón, la frecuencia del vandalismo cayó vertiginosamente. La cuenta es compartida, por lo tanto las ediciones siguen siendo anónimas. Sin embargo, pareciera que el hecho de tener que loguearse desalienta el vandalismo.
  • Es un espacio privado. Mis correcciones, los errores, las notas -sobre todo tratándose de niños de 12 años- es mejor que no sean públicas.
  • Ahora son ellos los que crean documentos, desde el inicio mismo tienen la responsabilidad del trabajo. Hasta este momento sólo he insistido con la edición del título, pero ya tendré que acostumbralos a organizarlos.
  • A mí me resulta muy práctico. (Auto) comparto con mi cuenta personal algunas carpetas y muevo ahí los documentos que tengo que corregir. Por ahora lo hago yo, en poco tiempo espero que aprendan a hacerlo ellos.
  • Los cambios recientes en los comentarios, transforman a los google docs en una herramienta ideal para corregir trabajos escritos.

Admito que el comienzo no fue fácil. He escuchado muchas veces que los alumnos no tienen problemas con las herramientas, pero no es así. Por un lado, 36 niños de 12 años compartiendo una cuenta pueden causar mucho caos. Pero, además, es necesario dedicar un momento (en realidad, varios) de la clase a las dificultades instrumentales que sí tienen nuestros alumnos digitales. Cuestiones tan elementales como escribir un título o agregar un doc a una carpeta, otras más sofisticadas (?!) como compartir o publicar, upload o download no vienen por default entre las competencias de los nativos.


Sí, mucha paciencia para:

  1. Evitar decirme a cada rato, pero yo sólo enseño inglés. (No enseño tecnología).
  2. Respetar los tiempos de cada alumno (tan dispares). 
  3. Diseñar estrategias coaching entre pares (a contramano del individualismo). 
  4. Escribir tutoriales (tan aburrido). 
  5. Pautar dejando espacio para la iniciativa individual y la creatividad (difícil equilibrio).